Sáb. Dic 14th, 2024
Por ser la coordinadora de la mayoría en el Congreso de la Ciudad de México, la diputada Martha Ávila es quien carga más responsabilidad del papel tan lamentable que ha hecho ese órgano legislativo de 2019 a la fecha.
Por ser la coordinadora de la mayoría en el Congreso de la Ciudad de México, la diputada Martha Ávila es quien carga más responsabilidad del papel tan lamentable que ha hecho ese órgano legislativo de 2019 a la fecha.

Glorieta de Colón

Por ser la coordinadora de la mayoría en el Congreso de la Ciudad de México, la diputada Martha Ávila es quien carga más responsabilidad del papel tan lamentable que ha hecho ese órgano legislativo de 2019 a la fecha. No sólo se trata de la falta de interés político para convertir esa instancia en un verdadero contrapeso del Poder Ejecutivo Local, sino que ni siquiera pudieron ser elegantes ni disimular que son la oficialía de partes de Claudia Sheinbaum para simplemente procesar y aprobar, hasta sin cambiar un signo de puntuación, sus iniciativas. Eso sí, ahora Martha Ávila, quien aspira ser la candidata a la Alcaldía de Iztapalapa por Morena, fue la principal impulsora de que el Congreso despilfarre en celebraciones por los 35 años de actividades legislativas en la CDMX, pues se creó en 1988 la Asamblea de Representantes del Distrito Federal, abuela del Congreso CDMX.

 

Morena mete acelerador

Luego de varios jalones de orejas y un panorama real de que cuando menos el 50 por ciento de la gente en la capital quiere que se vaya Morena, el presidente de ese partido en la CDMX, Sebastián Ramírez, empieza a dar color en la agenda de temas periodísticos en la capital del país. Desde hace al menos tres semanas, prácticamente diario emite un posicionamiento sobre temas importantes, que le han empezado a generar difusión en medios y sitios web importantes y serios. Parte de la estrategia de Ramírez fue contratar como responsable de Comunicación Social de Morena en la CDMX a la periodista Wendy Roa, quien tiene vasta experiencia en los medios y en particular en temas citadinos. Lástima que a Ramírez no se le ocurrió contratarla cuando él fungió como “vocero” de Sheinbaum, pues hay que recordar que durante su gestión en Comunicación Social es que vino la debacle en la imagen de la jefa de Gobierno. Bueno, al parecer en esa área Sheinbaum sigue padeciendo. Más vale tarde que nunca.

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